Hace unos días y como anticipo de la
presentación oficial, que tendrá lugar el próximo domingo 16 de octubre,
los organizadores del Giro de Italia anunciaron el recorrido de las dos
etapas de montaña más duras (salvo sorpresa final) que tendrá la
edición del próximo año.
Se trata de las etapas Caldes - Passo dello Stelvio -> noticia,
en el penúltimo día de carrera y con un durísimo trazado de 218 km y
casi 6000 m de desnivel, incluyendo una vertiente inédita del Mortirolo
antes de la ascensión final al Stelvio por Bormio; y Falzes - Cortina d´Ampezzo -> noticia,
de 187 km y con el exigente Passo Giau a sólo 17 km de la línea de
meta, con los puertos previos del Passo Duran y Forcella Staulanza
completamente encadenados.
Más allá del diseño concreto de cada
etapa, fantástico en la jornada de Cortina pero mejorable en la del
Stelvio (al menos en nuestra opinión), no cabe duda de que son dos
recorridos durísimos y donde si los corredores se muestran combativos se
podrá ver un gran espectáculo. Esperemos que el resto del recorrido
esté a la altura y que el nuevo director de la carrera, Michele Acquarone, cumpla lo que prometió a finales de septiembre: un Giro duro pero equilibrado y con menos traslados entre cada etapa -> declaraciones.
De todos modos, hasta que no se dispute
la carrera no es 100% seguro que éste sea el trazado definitivo de esas
dos jornadas, ya que en los ultimos años siempre ha habido varias etapas
en las que los organizadores han cambiado significativamente la ruta
respecto a lo que estaba anunciado.
17ª ETAPA (Miércoles 23 Mayo): FALZÉS – CORTINA D´AMPEZZO (187 km)
Dificultades montañosas:
- Terento -desde el km 6,2- (km 8) -> galería fotográfica
- Passo Valparola -más el tramo previo hasta Stern/La Villa- (km 73)
- Passo Duran (km 129,2) -> galería fotográfica
- Forcella Staulanza (km 150,1) -> galería fotográfica
- Passo Giau (km 169,6) -> galería fotográfica
Espectacular etapa de alta montaña, con 4500 m de desnivel acumulado y 70 km finales sin prácticamente llano
gracias al encadenado “en escalera” de Duran, Staulanza y Giau, este
último una subida de casi 10 km al 9,4 % de media y apenas a 17 km de la
llegada en Cortina d´Ampezzo.
Justo de salida los corredores tendrán
que afontar la ascensión no puntuable a Terento (si bien con más de 5 km
al 5% podría hacerlo perfectamente), tras cuyo rápido descenso y unos 20 km más o menos llanos, aunque picando ligeramente hacia arriba, se iniciará la larga subida al Passo Valparola, primero con pendientes muy suaves, siendo más un falso llano que otra cosa, pero ganando dureza hasta llegar a una zona de 6 km al 8,2 % cerca de la cima, situada a casi 2.200 m de altitud. El largo descenso
de Valparola termina en Caprile, dando paso a más de 20 km de falso
llano favorable hasta llegar a la localidad de Agordo, punto de inicio
del Passo Duran: un puerto sin rampas extremas pero muy constante, con 7 km centrales al 9,5 % de media, y que ya hizo estragos la última vez que se ascendió, en la 11ª etapa del Giro 2005. Una vez coronado Duran, fuerte bajada aunque bastante corta en busca del pueblo de Dont, donde sin un metro llano da comienzo la subida a Forcella Staulanza.
Se trata de una ascensión muy irregular, con tramos exigentes separados
por varios descansillos y lo más duro en la parte inicial: 2 km al 9,8
%.
Después de coronar Staulanza, a 37 km de la línea de meta, bajada hacia la localidad de Selva di Cadore (con una zona de falsos llanos intercalada) para encarar uno de los puertos más impresionantes de los Dolomitas, el Passo Giau. Hay que decir que si bien ya se subió en la brutal etapa reina del Giro 2011 -> clasificación,
siendo el puerto donde se rompió el grupo, en esta ocasión se afrontará
por la vertiente contraria, aún más exigente. Y existe una variante todavía más dura, la que se ascendió en el Giro 2008
(y se bajó en la pasada edición), compartiendo la durísima parte final
pero añadiendo varios km de subida previa al llegar desde Caprile.
Una vez en la cima de Giau restarán 17,4 km para el final de la etapa, casi todos ellos de descenso -> plano de la bajada
… a excepción de un suave repecho intermedio y el km y medio final, con
un pequeño tramo llano antes del repecho de meta, ya en las calles de
Cortina d´Ampezzo, una de las localidades más importantes de los
Dolomitas y un auténtico paraíso para los amantes de la montaña.
Habrá que ver como es el recorrido global del Giro y la actitud de los corredores cuando llegue la hora de la verdad, pero a priori es una etapa muy ilusionante,
con un diseño inmejorable para ver batalla desde lejos, y dándole por
fin protagonismo al Passo Giau. La única pega viene de la jornada con
final en el Stelvio, ya que si las diferencias en la general son escasas
los corredores podrían pensar en reservar fuerzas para ese día y no
arriesgar aquí con ataques lejanos. Esperemos que no suceda así y se
pueda ver un gran espectáculo.
.20ª ETAPA (Sábado 26 Mayo): CALDES – PASSO DELLO STELVIO CORTINA D´AMPEZZO (218 km)
Dificultades montañosas:
- Passo del Tonale (km 31,9) -> galería fotográfica
- Aprica (km 77,3) -> galería fotográfica
- Teglio (km 97,1)
- Motta -hasta el km 8,8- (km 132,8)
- Mortirolo por Tovo S.Agata -hasta el km 11- (km 161,4)
- Passo dello Stelvio (Meta) -> galería fotográfica (las primeras imágenes y las últimas son de otra vertiente)
En el penúltimo día de carrera los ciclistas tendrán que afrontar un durísimo recorrido,
con 5900 m de desnivel acumulado y 2 auténticos especiales (aunque en
el Giro no exista esta categoría) por el camino: el Mortirolo por la
vertiente de Tovo S.Agata, con rampas de hasta el 21 %; y el “rey
Stelvio” por la vertiente de Bormio, una subida de 22 km y más de 1500 m
de desnivel.
A los pocos km de iniciarse la etapa el terreno ya picará hacia arriba en busca del Passo del Tonale,
un puerto muy habitual del Giro y que si bien no presenta grandes
rampas es muy constante al 6-7% durante casi la ascensión. Una vez
coronado, larguísimo descenso
hasta llegar a Edolo, localidad de inicio de otro puerto clásico de la
carrera, el Passo Aprica, aunque no está claro si se subirá por la
tendida vertiente tradicional, con sólo un km superando el 5,5 %, o por
la variante estrenada en 2010,
con una primera mitad muy irregular que incluye rampas de hasta el 15
%. Después de alcanzar la cima, en la localidad de Aprica, dará comienzo
un fuerte descenso en busca de Stazzona y Bianzone, donde sin
prácticamente llano empezará la inédita subida a Teglio: 5,9 km al 7,9 % y con puntas del 14 %.
El suave e irregular descenso de Teglio
dará paso al tramo más sencillo de la etapa, con casi 15 km más o menos
llanos y por buena carretera de vuelta a los alrededores de Aprica,
donde el recorrido se complica con la subida a La Motta, pequeña
población donde se tomará un desvío a la izquierda para repetir la
bajada hacia Stazzona que se hizo anteriormente. Finalizado ese corto
pero complicado descenso habrá una nueva zona llana hasta alcanzar la
localidad de Tirano (final de etapa en el Giro 2011), para tras un duro
repecho llegar a Tovo di Sant´Agata y afrontar una terrible vertiente inédita del Mortirolo, con 11,1 km al 10,4 %
según cifras oficiales … a pesar de un descansillo intermedio sin
asfaltar (a día de hoy, al menos) que baja la pendiente. El final de la
ascensión no estará en la auténtica cima del Mortirolo/Passo di Foppa,
sino en el cruce con la carretera que sube desde Mazzo: la vertiente habitual y que se utilizó por última vez en la 19ª etapa del Giro 2010,
a la postre decisiva para la resolución de la carrera. En esta ocasión
se bajará por ahí hasta la cota 1.570 m, donde se tomará un desvío hacia
el norte para continuar el descenso hacia Grossio (desde el km 11,5), una vertiente inédita en esta carrera … pero usada recientemente, también como bajada, en el Giro Donne 2011. Se trata de un descenso complicado, con muchas curvas y carretera estrecha que no permitirá apenas respiro.
Terminado el descenso se entrará en un
largo tramo de falso llano ascendente (con 2 km intermedios al 7 % poco
después de La Presse) hasta llegar a Bormio, localidad de inicio de la vertiente oeste del Passo dello Stelvio: 22 km al 7 % de media y con lo más duro justo al final, 3 km al 8,5 %, finalizando la ascensión a 2.757 m de altitud -> cima.
Su gran longitud, constancia en la pendiente (a excepción de 2
descansillos) y altitud de los últimos km debería hacer mucho daño,
sobre todo teniendo en cuenta el gran esfuerzo previo que habrán
realizado los corredores.
El mítico Stelvio será el final de la etapa, aunque no por su vertiente más conocida. Click para ver una descripción detallada.
El Stelvio/Stilfserjoch es el tercer paso de montaña asfaltado más alto de los Alpes, sólo por detrás del Col de l´Iseran (2.770 m) y La Bonette
(2.802 m), aunque este último gracias a un “lazo” final ya que el
auténtico puerto está casi 100 m más abajo. Como final de etapa si es
récord de altitud en carreras europeas … aunque empatado consigo mismo,
ya que esta será la 4º ocasión en que albergue una llegada,
con los antecedentes de 1965, 1972 (con victoria de José Manuel Fuente
“Tarangu”) y 1975 (con triunfo de Francisco Galdós), aunque sólo en 1965
subiendo desde Bormio. De hecho ni siquiera como puerto de paso se ha
había vuelto a subir por ahí, afrontándolo siempre por la vertiente de Prato Allo Stelvio, todavía más dura y escénica gracias a sus 23 km al 7,8 % y a la increíble sucesión de herraduras del tramo final, la última vez en una etapa del Giro 2005 camino de Livigno.
Volviendo a la jornada del Giro 2012, no hay duda de que sobre el papel es una etapa muy exigente y espectacular, al nivel de las más duras de la historia,
con mucho kilometraje y desnivel acumulado, una “pared” como el
Mortirolo y una subida final al Stelvio que, por sus características y
todo el desgaste previo, podría provocar diferencias enormes en meta y
ser clave en la resolución final de la carrera. De hecho, ambas subidas
están entre los puertos más duros que se han ascendido en carrera.
Sin embargo, creemos que el diseño concreto del recorrido resulta discutible,
con varios rodeos innecesarios en la parte central y una zona entre el
Mortirolo y el Stelvio muy favorable para el trabajo de un grupo frente a
corredores en solitario. Si lo importante era acabar en el Stelvio
habría tenido más sentido llegar a través del Passo di Gavia,
completamente encadenado. Y si la intención era darle protagonismo al
estreno del Mortirolo por Tovo S. Agata la llegada en el Stelvio se lo
“roba”, aparte de hacer menos probable la batalla previa. Los
organizadores están promocionando esta jornada como la “etapa de los fans”, ya que hubo una votación en forma de eliminatorias
para ver los puertos más deseados, una buena maniobra publicitaria …
pero hecha de un modo sospechoso, enfrentando puertos que poco o nada
tenían que ver y dando la sensación de que los resultados estaban muy
dirigidos.
Además, esta jornada del Stelvio podría
acabar siendo perjudicial para las etapas de montaña previas, ya que al
ser tan llamativa y con un final tan duro puede provocar mayor
conservadurismo entre los escaladores, dejando los “deberes” para esta
etapa, sobre todo si en el global de la carrera hubiera pocos km
contrarreloj. Quizás una buena solución habría sido no terminar en alto o
hacerlo en una subida más blanda, al estilo de las habituales etapas
con el Mortirolo. En cualquier caso, como siempre la última palabra la tienen los corredores.
Y si muestran una actitud ofensiva durante todo el Giro esta jornada no
tendría por qué afectar negativamente a las etapas previas, además de
tener terreno de sobra para que se vea un gran espectáculo.
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Por otro lado, aparte de estas dos jornadas de montaña, también se conoce el recorrido oficial de las tres primeras etapas del Giro 2012 -> noticia, que se disputarán en Dinamarca los días 5, 6 y 7 de mayo.
La jornada inaugural será una
contrarreloj individual de 8,7 km en la ciudad de Herning, con un
trazado básicamente llano pero muy técnico debido a la gran cantidad de
curvas. Las otras dos etapas, ya en línea, también tienen un recorrido
bastante plano y con a priori la única dificultad del viento y la
posible formación de abanicos, sobre todo en la primera de ellas, ya que
se atravesarán zonas muy expuestas y cercanas al mar.
Será la 4ª ocasión en lo que llevamos de
siglo en que el Giro de Italia comenzará la carrera fuera de sus
fronteras, y siempre en países del noroeste de Europa: en el año 2002 en
la localidad de Groninga, en los Países Bajos; en 2006 en Seraing,
perteneciente a Bélgica; y en la edición de 2010 en Ámsterdam, de nuevo en los Países Bajos.
Sobre el recorrido en sí, es una gran
noticia que la carrera vuelva a empezar con una crono individual, algo
que se echó muy en falta en las 3 GV de este año, si bien el trazado
resulta un poco extraño, con varios “casi bucles”. En cuanto a las
etapas en línea, la primera tiene el aliciente de la posibilidad de
abanicos, aunque hecha justo al revés la zona propicia quedaría más
cerca de meta. En la segunda se echa de menos una ruta más selectiva,
algo que era factible gracias a las pequeñas cotas de la zona, pero si
en el resto del Giro hay buena media montaña tampoco pasa nada porque
esta etapa sea más llana.
